lunes, 11 de marzo de 2013

Cine: Villegas (Por Juan E. Tranier)


La ópera prima de Gonzalo Tobal, Villegas (2012), cuenta con dos actores extraordinarios, Esteban Lamothe y Esteban Bigliardi, y sobre ellos dos recae la película entera. Un film de cámara, personal e íntimo.
Esteban y Esteban, alias Pipa (Lamothe y Bigliardi, respectivamente), son primos y vuelven a su pueblo natal, Villegas, al entierro de su abuelo. Esteban y Pipa son muy diferentes entre sí: Esteban es ordenado, pulcro, tiene un departamento moderno y con un mueblario geométrico: Pipa vive en una casita sucia, caótica, tiene la barba crecida y es muy laxo con sus tiempos.
La película de Tobal hace un magnifico uso de la dosificación de información, lentamente nos vamos enterando que ambos tenían un vínculo muy fuerte, que hay cosas de las que no nos vamos a enterar, pero que marcaron a fuego a ambos (una posible relación de Pipa con la hermana de Esteban; el pasado rockero de Esteban). Lo no dicho pesa más que lo que se habla.
Ambos están radicados en Buenos Aires y sus vidas han tomado rumbos diferentes. Esteban está a punto de casarse y Pipa vive de forma más informal, armando y desarmando proyectos musicales. Esteban es una persona tensa, rígida; Pipa tiene un andar relajado, pero melancólico. Ambos están en la encrucijada de sus vidas, están en los primeros treinta y es momento de definiciones, de tomar decisiones. Esteban parece someterse lenta e inexorablemente al mandato social y familiar mientras que Pipa no se halla a sí mismo en Buenos Aires pero tampoco quiere volver a Villegas, donde lo espera su familia y el trabajo en el campo.
Así como hay películas de iniciación, o de coming of age, existen películas que son de despedida, que miran de frente a la dura realidad que se les avecina y deciden hacerle frente. Un buen ejemplo puede ser ToyStory 3 (2010, Lee Unkrich), donde Andy tenía que regalar sus juguetes para empezar su camino en la universidad y en la vida adulta, o el final de Supercool (2007, Superbad, Greg Mottola), donde los dos amigos tenían que separarse y empezar en soledad sus caminos en la universidad. La mirada es triste y tierna, melancólica y ligeramente alegre, ya que hay momentos para la distensión y el disfrute, breves espacios donde el tiempo se congela y se vuelve a ser el se era antes (la escena de los dos dentro del tanque de granos, tocando la guitarra, fumando porro y contando chistes). Pero, tiempo implacable, esos momentos duran poco y Esteban deberá volver y Pipa tomar una decisión.
Mención aparte a la banda de sonido creada por Nacho Rodríguez Baiguera (Onda Vaga, Nacho y los caracoles, Los Campos Magnéticos) que es justa, exacta y preciosa, sobretodo una pequeña samba que canta Pipa y la canción que abre y cierra el film: No Te Quedes Acá. También el rescate de una vieja canción de Marlene Dietrich, Where Have All The Flowers Gone? compuesta por Pete Seeger, utilizada en una escena emocionalmente hermosa y demoledora a cargo de Bigliardi.
Ojalá este sea el modelo para un cine nacional amable, poco críptico pero inteligente, de acceso fácil y manufactura impecable. Gonzalo Tobal es una promesa y una realidad, con entusiasmo esperaré sus próximas películas.



Ficha técnica:

Villegas, 2012, 98’, ARG/HOL/FRA, Rei Cine / Tresmilmundos Cine / PBK Cine / NFI Productions (HOL) / Cine-Sud Promotion (FRA)

Dirección: Gonzalo Tobal

Guión: Gonzalo Tobal

Producción: Benjamín Domenech, Juan Villegas, Santiago Gallelli, Thierry Lenouvel, José Tobal, Matías Galera

Fotografía: Lucas Gaynor, Fernando Lockett

Montaje: Delfina Castagnino

Arte: Julieta Dolinsky, Sandra Fink

Música: Nacho Rodríguez Baiguera

Reparto: Esteban Lamothe, Esteban Bigliardi, Paula Carruega, Lucía Cavallotti
Sitio oficial: 

http://www.filmvillegas.com.ar/
Facebook oficial: 

https://www.facebook.com/filmvillegas